Cientos de personas se concentraron ayer –17 de mayo, día internacional contra la LGBTIfobia– en diferentes localidades de Gipuzkoa y de Euskal Herria para denunciar la agresión del pasado sábado en Villabona, donde un grupo golpeó a una pareja de hombres. Villabona, Zizurkil, Zarautz, Donostia o Santurtzi, entre otros municipios, convocaron concentraciones para mostrar su apoyo a los agredidos.
«No queremos que esto vuelva a sucederle a nadie»
La Ertzaintza ha informado de que por el momento no hay detenidos y que se investiga la motivación de la agresión, sin embargo las declaraciones de los agredidos, así como de una testigo, señalan motivaciones homófobas y racistas. El joven matrimonio de origen colombiano se trasladó a Zizurkil hace un mes, y las agresiones verbales incidían no solo en su orientación sexual, sino también en su procedencia.
Desde la perspectiva interseccional, las diferentes discriminaciones que una persona sufre, en este caso homofobia y racismo, no dan como resultado exclusivamente la suma de ambas, sino que se perpetúan discriminaciones especificas. De ahí la importancia de considerar y denunciar el carácter no solo homofobo, sino también racista de la agresión de Villabona.
Aumentan los delito de odio, también en Euskadi
Más de 300.000 personas han sufrido agresiones homófobas o tránsfobas y un millón de personas han sido acosadas por su orientación sexual o identidad de género en los últimos 5 años en el Estado. Los datos muestran una preocupante tendencia al alza en los delitos de odio en los últimos tres años, especialmente vinculados a homofobia, transfobia, racismo y xenofobia y Euskadi no es una excepción.
La Ertzaintza registró 438 incidentes de odio en 2022. La inmensa mayoría sigue siendo víctima de racismo y xenofobia (231 casos, 52 %, un 42,6 % más que en 2021), seguido de ataques por la orientación e identidad sexual (96 casos, 21,6 %, un 31,5 % más que en 2021). Consultar artículo original de la EITB
Manifiesto de la concentración en Donostia